sábado, 25 de mayo de 2024
viernes, 24 de mayo de 2024
Buitre común
Buitre común (Gyps fulvus)
Ave rapaz planeadora y carroñera que surca nuestros cielos aprovechando las corrientes de aire.
¿Quién no los ha visto alguna vez? Sólo hay que mirar de vez en cuando al cielo para verlos formando círculos.
No son mis mejores instantáneas de esta rapaz pero son las que tengo de la zona, concretamente en las granjas cercanas al embalse de Valdelafuen.
miércoles, 22 de mayo de 2024
Fiestas en Layana
Como todo pueblo que se precie, Layana también posee sus fiestas y celebraciones, y todas con un trasfondo religioso que se prolongará hasta que sus habitantes así lo vivan y celebren.
Por orden cronológico:
- En enero (en torno al 17) se encienden hogueras dedicadas a San Antón, San Sebastián y San Fabián.
- Romería el 21 de abril a la Virgen de los Bañales, tradicionalmente el 25 de abril en San Marcos.
Consiste en ir caminando juntos desde el pueblo a la ermita de la Virgen de los Bañales, celebrando allí una ceremonia religiosa en honor a la Virgen. Posteriormente una vez bendecidos, se reparten dobleros, torta típica, y vino a los asistentes. Además cada familia o cuadrilla que lo desea preparan su propia comida, rogando el máximo respeto a las zonas de excavación del yacimiento.
- Fiestas de Layana en torno al 15 de agosto (este año 2024 van del 14 al 18)
- 29 de diciembre día de su patrón, Santo Tomás Becket (del que hablaré en posteriores entradas) y desde el año 2007 se hace coincidir con el Día del Farinoso, dulce típico elaborado con miel, canela y azúcar (del que también dedicaré una entrada más adelante).
Layana ha mantenido en el 29 de diciembre la celebración del día del patrón. Sin embargo, hace ya muchos años que las fiestas se trasladaron al 14 de septiembre, y la explicación no puede resultar más curiosa. "Fue ya antes de la Guerra Civil, un año hacía mucho frío y cayó tal nevada, que los forasteros que habían venido a celebrar las fiestas tuvieron que pasar en el pueblo cerca de un mes, porque no se pudo salir de casa", relata Carmen, vecina del municipio, para Heraldo de Aragón. "La comida se agotó en todas las casas de Layana, de manera que la decisión tomada luego fue trasladar la celebración a una fecha con una climatología más favorable". Después de aquello, las fiestas se adelantarían al mes de agosto para hacerlas coincidir con las vacaciones de muchos de los vecinos que viven fuera y destinan esos días a visitar su pueblo.
Ruta 2: Layana, Árbol centenario de la Barberá, Granjas y Arboleda
Ruta corta, sencilla, sin dificultad técnica. De unos 5 kilómetros. Circular. Adecuada para ir con niños. Sin desnivel.
Inicio en el Bar Social de Layana. Se toma dirección carretera A-1202, hacia la entrada a Layana que está más cercana a Uncastillo, la cual habrá que cruzar extremando las precauciones.
Pasaremos un puente sobre el que discurre el río Riguel (momento adecuado para preguntarnos de dónde viene y hacia dónde va, clic aquí).
Al llegar a un cruce de caminos tomaremos el de la izquierda dirección a La Casa de La Barbera, propiedad privada, pero a la que podremos acceder para contemplar un árbol centenario, una Sabina (si bien el cartel indicador marca "Ciprés centenario" parece estar erróneo).
De aquí continuaremos por el camino llamado Acequia de Llor que nos conducirá hasta una zona de granjas. Al pasar podremos ver y oler a los terneros y resto de ganado vacuno.
Vamos completando la vuelta. Buen momento para parar a almorzar en la arboleda antes de culminar el recorrido.
De nuevo se pasa por el puente sobre el río Riguel y se cruza la carretera con cuidado mirando a ambos lados.
No tiene mucha perdida pero podéis descargar la ruta desde mi wikiloc, clic aquí.
martes, 21 de mayo de 2024
Alacrán o Escorpión amarillo
sábado, 18 de mayo de 2024
jueves, 16 de mayo de 2024
Yacimiento arqueológico de Los Bañales (V): el Acueducto y sus Pilares
Antes de contar con el acueducto, Los Bañales y sus termas, se abastecían de agua con un plan de cisternas y de manantiales; desgraciadamente no se conservan. El crecimiento de la ciudad les obliga a construir un sistema de abastecimiento mayor.
Entre el 9 y el 5 a. C. es cuando se supone que se construyó el acueducto. Algunos de los pilares dejan entrever que hubo legiones que colaboraron en la construcción de este: IV Macedónica, VI Víctrix y X Gemina. Estas legiones se encontraban en la península construyendo la vía entre Caesaraugusta-Pompelo.
Se supone que el acueducto contaría con más de setenta pilares. De estos, se han conservado solo treinta y dos. El tramo elevado con los pilares se complementa al specus (tramo tallado en la propia roca). El specus aprovecha las laderas o las pendientes para transportar el agua. De esta forma, el agua podía llegar hasta Los Bañales.
Yacimiento arqueológico de Los Bañales (IV): las Termas
Es el edificio mejor conservado. Tenía capacidad para unas sesenta personas, escasa para el volumen de población, en torno a 2000 personas que tenía la ciudad cuando se construyeron, a finales del siglo I d.C. Sin embargo, cuentan con todas las salas necesarias para un aseo completo.
Se accedía por un vestíbulo donde se encontraba la taquilla y el control de entrada y salida. La siguiente sala a la que llegamos es el vestuario -apodyterium-. Allí se conservan los huecos que pertenecieron a las "taquillas". Desde esta sala se puede acceder al todas las demás: frigidarium (sala de agua fría) que cuenta con una natatio (piscina) de poca capacidad; tepidarium (sauna de temperatura templada) y; caldarium (sala de agua caliente) que tiene dentro una sudatio (sauna). Desde el frigidarium y desde fuera del edificio se podían acceder a las letrinas.
Yacimiento arqueológico de Los Bañales (III): la Domus
Se trata de una zona residencial próxima a un espacio público. Este último comenzó a excavarse en los 70 del siglo XX, y en él se aprecia una escalera, que conduciría a un nivel inferior de la terraza, y un entramado de acanaladuras y depósitos horadados en el pavimento y en estudio.
Lo primero que llama la atención al subir desde Layana, son las columnas toscanas de arenisca que presiden el horizonte bañalense. Actualmente son dos pero, cuando fueron colocadas en torno al I d.C, pudieron llegar a ser unas ocho. Realmente no serían más que una parte del pórtico en el que cruzan las dos calles que articulan la zona, un cardo y un decumano. De estos conservamos la acera, así como los "pasos de cebra" de momento, que consisten en unos sillares colocados en perpendicular a la calle para poder cruzarla y, al mismo tiempo, para reducir la velocidad de aquellos carros que han dejado marcas en el pavimento (aún visibles).
El espacio nos ha descubierto cientos de pedazos de cerámica, decenas de hueso, cristal y varios tipos de metales (incluso un pendiente de oro). La última "novedad" son una especie de hogueras que aún presentan una incógnita para los arqueólogos.
Es en este lugar, al este del recinto, donde nos topamos con la domus en sí. Una vivienda de grandes dimensiones en la cual habitaría la élite de Los Bañales. Su crujía norte da a la calle más próxima a las columnas del pórtico, mientras que la este se orienta hacia la calle que conserva las aceras. Aún no se puede determinar dónde estaría la puerta de entrada a la casa, puesto que no se ha excavado del todo hacia el oeste ni hacia el sur, aunque lo más probable es que se encuentre aquí por las condiciones climáticas y porque la calle iría en dirección a las termas. Presenta un peristilo central, o lo que es lo mismo, un patio interior, que articula toda la vivienda y que, en su momento de construcción o de inicios de uso (sobre el I d.C), tendría 11 columnas sustentándolo y unos muretes que lo rodearían. Por ello aparece también un orificio que da lugar a un pequeño canal con la finalidad de dar salida al agua acumulada. Una de las estancias que se abre hacia él muestra algunas pinturas murales rojizas, negras y blancas, dando a entender que podría tratarse del triclinium o comedor. El resto aún están siendo estudiadas, si bien está clara la disposición de varios dormitorios (cubicula) en el ala oriental de la domus, profusamente decoradas, además, con pinturas imitando incrustaciones marmóreas.
miércoles, 15 de mayo de 2024
Yacimiento arqueológico de Los Bañales (II): el Foro
El foro es el lugar sobre el que se desarrolla la ciudad y abarca todo tipo de actividades como el comercio, la política o la religión.
Se sitúa a las faldas del Pueyo y está asentado sobre una cimentación sobre la roca. Esto nos permite deducir que estaba "levantado" para que pudiera ser visible desde las vías que pasaban cruzando el valle.
Aunque es uno de los foros más pequeños conservados, consta de todos los componentes típicos.
Se articuló
en torno a una plaza pública a la que se abrían dos pórticos al norte y al
oeste y la Basílica, al este, donde se administraba la justicia de la ciudad. En
uno de los extremos estaba la Curia, donde se reunían los Senadores.
Fue el verdadero escaparate de la presencia romana en la ciudad,
construido a finales del siglo I a. C. y en constante proceso de cambio hasta
su abandono a mediados del siglo III d. C.
Las excavaciones nos han descubierto todo tipo de elementos que nos permiten confirmar la suntuosidad que emanaba esta plaza pública: desde una exedra dedicada a las deidades como Apolo, Júpiter o las Ninfas, hasta pedestales dedicados al emperador Tiberio, Lucio César o Quinto Sempronio Vítulo. Además también hay un monumento a la Victoria Augusta, acompañada de cuatro estatuas de miembros de la clase alta -M. Fabius Nouus y Porcia Fauentina entre ellos, que al parecer fueron quienes lo donaron.
Como curiosidad las placas que se ven ahora mismo son réplicas hechas por artesanos de Sádaba. Las originales están detrás tapadas para conservarlas mejor.
En el foro también encontramos la zona de las tabernae, talleres artesanales, locales de almacenaje y posibles viviendas.
Adjunto un vídeo de la fundación Los Bañales-Proyecto Arqueológico:
martes, 14 de mayo de 2024
Yacimiento arqueológico de Los Bañales (I)
Aunque situado actualmente en el término municipal de Uncastillo, es estrecha, por cercanía entre otras, la relación y unión de esta zona de Los Bañales con Layana. Por ello comienzo una serie de entradas que recogen la información de este yacimiento compuesto por el foro, las termas, acueducto y el domus.
El yacimiento de Los Bañales se encuentra situado en la llanura formada por los ríos Riguel y Arba de Luesia, en la que hay unas elevaciones superiores a los 540 m llamados "Pueyos"- en los que se habrían asentado las primeras civilizaciones que habitaron esta zona.
El Pueyo se encuentra en una posición dominante sobre la llanura y, además, cuenta con un cinturón rocoso de arenisca. Este cinturón supone un método natural de defensa.
Las investigaciones anticipan que el Pueyo de Los Bañales pudo estar ocupado desde el siglo IV a. C. pero con seguridad, en el siglo II a. C. Las evidencias encontradas están relacionadas con la cerámica, principalmente se trata de cerámica indígena y de cerámica de tradición hallstática.
Debió ocupar una extensión de algo más de veinte hectáreas de terreno, delimitadas al norte por un monumental espacio residencial, al sur por el cerro de El Huso y La Rueca, al este por Puy Foradado y el trazado elevado de un acueducto romano, y al oeste por la supuesta necrópolis al pie del cerro de El Pueyo.
Se ignora el nombre que la ciudad tuvo para quienes la habitaron y, también, aquel con el que pudieran conocerla los romanos a su llegada a la zona hacia el 195 a.C. En todos los años que se han dedicado al estudio de este yacimiento, muchos han sido los nombres posibles que se le han atribuido, Clarina, Muscaria, Atiliana, pero el que actualmente se considera más plausible es el de Tarraca. En cualquier caso, solo la aparición de alguna inscripción pública en las excavaciones futuras, en la que figure el nombre de la ciudad, podrá resolver esta incógnita.
Durante el principado de Augusto (27 a.C. al 14 d.C.) se produce una revalorización de las tierras cercanas a, la recién fundada, Caesar Augusta (Zaragoza). Fue el mismo Augusto quien fundó la ciudad en persona y ello permitió el auge de la Hispania citerior. Otra ciudad importante, no lejos de Los Bañales, era Pompelo (Pamplona), fundada por Pompeyo en el 72-71 a.C. Para unir estas dos ciudades se crearon muchas vías que pasaban por diferentes poblaciones, una de estas vías pasaría muy cerca de Los Bañales. Existen evidencias en los miliarios de la presencia de las legiones que pudieron haber contribuido a la revalorización y monumentalización de Los Bañales.
Así pues entre el año 15 a.C. y el 9 a.C. se debió producir el despegue inicial de esta zona durante el principado de Augusto con la construcción de la plaza pública.
La época de esplendor llega con la época Flavia, desde los años 70 d.C. hasta los comienzos del siglo II d.C. Es en este momento cuando se cree que se construyeron las termas que dan nombre al yacimiento.
En el periodo entre Marco Aurelio, Cómodo y Caracalla es cuando al parecer se construyen tabernae con el uso de materiales reciclados de otras construcciones monumentales. Estas tabernae eran talleres artesanales, zonas de almacenaje o posibles viviendas.
Su regresión llegó poco después hasta acabar con el abandono de la ciudad para el siglo IV d.C."
Hubo, sin embargo, una reocupación de la ciudad entre los siglo VI y IX d.C. conociendo presencia visigótica y, finalmente, también emiral islámica.
Después del despoblamiento de Los Bañales, la zona pasaría a convertirse en una cantera de reutilización de los materiales de edificios derruidos. Además, tal fue el abandono de la ciudad que se perdió, en la tradición, el nombre nombre antiguo latino de ésta. También fue objeto de disputa entre las nuevas unidades de territorio que comenzaban a aflorar en la temprana Edad Media.
Ya en el año 1154, el
nombre que usan las fuentes para referirse al yacimiento es por el que lo
conocemos en la actualidad: Los Bañales.
Adjunto un vídeo, del año 2013, en el que Javier Andreu, director de las excavaciones en el yacimiento, explica perfectamente la cronología de la época romana del mismo.
lunes, 13 de mayo de 2024
miércoles, 8 de mayo de 2024
La Torre
Sin duda uno de los elementos que destaca en el paisaje cuando nos vamos acercando a Layana es su imponente Torre, situada en la Placeta de las Campanas.
Se trata de un torreón fechado en el siglo XIII.
La primera referencia histórica es de 1186, año en el que Alfonso II confirma su pertenencia a Sancho de Biota. Formaba parte de un castillo que también englobaba la vecina iglesia de Santo Tomás.
En 1348 pertenecía a Juan Jiménez de Urrea, señor de Biota, y en 1412 a Juan de Sessé, partidario de Jaime de Urgell en el Compromiso de Caspe. En 1610 la villa y la torre pasaron a depender de Uncastillo.
La Torre consta de 20 metros de altura; su planta es rectangular de 8 y 5 metros de lado. Mantiene su remate con almenas rectangulares perforadas por saeteras. También presenta ventanales adintelados exteriormente y con arco en su interior. Cada una de sus caras posee en su parte superior una buharda con matacanes.
La puerta de entrada está en uno de los lados mayores, situada en altura y
bastante estrecha. El interior presenta tres plantas sostenidas por bóvedas
apuntadas.
En la segunda planta está la puerta original de la torre,
actualmente convertida en ventana, pues se ha abierto una puerta nueva en la
base. Tiene forma rectangular, decorada con un arco de descarga y un tímpano
liso sobre él.
El resto de aperturas son en forma de aspillera. También hay este tipo de apertura en las almenas que coronan la torre.
Está incluida dentro de la relación de castillos considerados Bienes de Interés Cultural en virtud de lo dispuesto en la disposición adicional segunda de la Ley 3/1999, de 10 de marzo, del Patrimonio Cultural Aragonés. Este listado fue publicado en el Boletín Oficial de Aragón del 22 de mayo de 2006.
La torre ha sido rehabilitada y es visitable ahora convertida en
el centro de interpretación ‘De Agricultura/Paisaje Rural Romano’, un centro de
interpretación sobre la vida rural en época romana en el entorno de la ciudad
romana que ocupaba el yacimiento de Los Bañales, en las Cinco Villas. Es un
centro pionero que te hará viajar en el tiempo y entender de qué modo Roma puso
en explotación agrícola el territorio circundante a Los Bañales.
También se ha recreado, a través de una maqueta, una explotación agrícola de
una villa romana y se han incorporado a la visita piezas arqueológicas
originales de Los Bañales o que se encontraban dispersas por el
territorio.
Este centro funciona con domótica y por tanto no hay ninguna
persona que se encargue de la visita. Al introducir la cuantía de la entrada en
un monedero, se abre la puerta y las luces para poder realizar una
visita "guiada".
martes, 7 de mayo de 2024
viernes, 3 de mayo de 2024
Río Riguel
El Riguel es un curso de agua del interior de la península ibérica, afluente del Arba. Discurre por la provincia española de Zaragoza.
Tiene su origen en la sierra de Uncastillo. Tras dejar a ambos lados de su curso localidades como Uncastillo, Layana y Sádaba, termina desembocando en el Arba (producto éste de la unión del Arba de Biel y el Arba de Luesia).
Perteneciente a la cuenca hidrográfica del Ebro, sus aguas terminan vertidas en el mar Mediterráneo.
Así se presenta a su paso cercano de Layana: